sábado, 1 de julio de 2017

El Big Brother de la política

 Francisco Garfias

Fernando Rodríguez Doval es uno de los tres panistas que, según el laboratorio canadiense Citizen Lab, fueron blanco de intentos de infección de su celular con el programa espía Pegasus.

Los otros dos, fíjese nomás, son Ricardo Anaya, jefe nacional del azul, y el senador Roberto Gil Zuarth. 

Ya se sabe que este programa está reservado a los gobiernos para la lucha contra el crimen o el combate al terrorismo, pero en México se ha utilizado para espiar a periodistas críticos y defensores de derechos humanos, según el diario neoyorkino.

Citizen Lab, de la Universidad de Toronto, nos vino a confirmar lo que ya sabíamos: Pegasus es utilizado también para espiar a políticos opositores.

“Si esto hubiese pasado en Estados Unidos, Inglaterra, Francia o Alemania, estaríamos hablando de una crisis constitucional”, nos dijo Rodríguez Doval, vocero del CEN del PAN.

Agregó: “Es inaceptable que esto ocurra en un país democrático y que el gobierno lo minimice y voltee hacia otro lado… Que se espíe a periodistas críticos, defensores de derechos humanos, al Presidente y a dirigentes del principal partido opositor es gravísimo”, subrayó. 

Fernando vivió en carne propia una historia de espionaje telefónico. Fue en 2014. El Universal dio a conocer la grabación de una charla que sostuvo con el senador Ernesto Cordero.

En esa charla, el exsecretario de Hacienda le pedía su ayuda para “hundir” a Gustavo Madero y a Luis Alberto Villarreal, entonces coordinador de los diputados azules.

“Le harían un gran favor al PAN”, dijo entonces el senador Cordero
El espionaje a opositores, periodistas incómodos o activistas es una práctica condenable en todo el mundo. Viola la privacidad y los derechos de los ciudadanos. En un país democrático es inaceptable que instancias de seguridad del gobierno, o poderosos grupos privados o delincuenciales, se dediquen a hacerla de Big Brother.

No hay duda que en ese país se espía. Ya lo dijo el presidente Peña. Ni él se siente cómodo cuando habla por teléfono

El senador Roberto Gil, víctima de espionaje cuando fungía como presidente de la mesa directiva del Senado, fue contundente al hablar del tema.

“El espionaje es una forma de crimen organizado, un delito grave que debe castigarse con cárcel”, subrayó.
Voy a hacer una pregunta pertinente que no le he escuchado a nadie: ¿Es válido que un periodista o conductor, entre ellos los que fueron “fisgoneados”, utilice información obtenida vía el espionaje?

Ejemplos de lo anterior sobran. Aquí van quince como recordatorio:

1. La llamada de Purificación Carpinteyro con un “empresario” de nombre Pepe, en la que le propone hacer negocios con la Reforma de Telecomunicaciones.

2. Agustín Torres Ibarrola presenta denuncia ante la PGR en 2012, ante quien resulte responsable de actos de espionaje, tras revelarse llamada de Josefina Vázquez Mota con el entonces legislador.

En la llamada difundida, Vázquez Mota responsabiliza a Alejandra Sota y a Genaro García Luna de la intervención de sus comunicaciones.

3. El empresario Moisés Mansur confiesa que le dio una tarjeta de crédito adicional a la suya a la esposa de Javier Duarte con la que pagaba sus gastos.

4. Llamada privada entre César Duarte y el empresario Ángel Cano en el que discuten mecanismos para pagar una deuda del gobernador. La llamada fue proporcionada por el propio empresario.

Por cierto que a Duarte, acusado de comprar un banco siendo gobernador de Chihuahua, le giraron ayer orden de aprehensión ¡por delitos electorales!

5. La difusión de una conversación telefónica realizada el 12 de julio de 2009 entre Servando Gómez Martínez, alías La Tuta, identificado entonces como el líder La Familia Michoacana, y el entonces candidato a diputado federal César Godoy Toscano.

En el audio el narcotraficante felicitó anticipadamente a Godoy por su triunfo en los comicios.

6.La llamada de Andrés Granier en la que habla de su estilo de vida y sus gastos.

7. Audios revelados por La Jornada de las conversaciones filtradas entre Kamel Nacif y Mario Marín, alias El góber precioso.

8. Audio en el que Luis Téllez acusa a Carlos Salinas de robarse la partida secreta.

9. AMLO da a conocer llamadas de Elba Esther Gordillo.

10. EL desdén de Lorenzo Córdova con líderes indígenas.

11. La citada conversación entre Ernesto Cordero y Fernando Rodríguez Doval.

12. La llamada de El Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación, con un mando de la policía de Jalisco.

13. Anaya y Basave dan a conocer audios sobre compra de votos en Veracruz.

14.- El audio del hijo de AMLO con Yeidckol Polevnsky.

15.- El audio donde Raúl Salinas se pelea con su hermana Adriana e involucra a su hermano Carlos en desvío de fondos. 

No evado la pregunta que hice párrafos arriba. ¿Qué haría yo si me llegara una “filtración anónima”?

Si se trata de una denuncia de anomalías, abusos, arbitrariedades —y no una calumnia— es válido publicarla. Pero si sólo busca desprestigiar, golpear, grillar, denostar por conveniencia, la desecharía.

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