La pamplonada oaxaqueña y el góber Murat

Puerto Libre – Guillermo Hernández Puerto

La pamplonada oaxaqueña y el góber Murat. La pamplonada oaxaqueña se pudo observar el pasado miércoles, 12 de julio, cuando el gobernador Alejandro Murat Hinojosa hizo acto de presencia para dialogar con vecinos de 23 colonias de la agencia Vicente Guerrero de la Villa de Zaachila.

Entre empujones y gritos la muchedumbre rodeó al gobernador. Parecía aquella pamplonada donde los corredores rodean a los toros y corren al frente por las calles de Pamplona, España, a veces esa fiesta popular se tiñe de rojo.

El gobernador no fue a esa agencia a darse un baño de pueblo como se dice en la jerga política, sino a dialogar con los vecinos para resolver el conflicto que se ha desatado ahí por las acciones y la presencia de la organización 14 de Junio.

El mandatario, a pesar de estar rodeado por la muchedumbre, escuchó todas las quejas y peticiones de los pobladores, especialmente el rechazo al regreso y presencia de miembros del Frente Popular 14 de Junio, cuyo líder, don Panchito, continúa prófugo tras expedírsele órdenes de aprehensión. El gobernador salió ileso de esa pamplonada ocurrida en la Villa de Zaachila, pues no recibió ningunas cornada de las pasiones políticas que provocaron el bloqueo al basurero municipal, el cual convirtió a la ciudad de Oaxaca en un muladar en vísperas de las fiestas de la Guelaguetza. La recolección de basura se ha iniciado para bien de la ciudad y de quienes la habitan. Un capítulo político del cual sale bien librado el gobernador Murat.

La matanza de Nochixtlán, el mejor resultado de la reforma educativa. La tortuosa batalla entre la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la Secretaría de Gobernación, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el gobierno de Gabino Cué, de Oaxaca, culminó con la matanza de Nochixtlán, donde fueron asesinados a balazos ocho civiles, con un saldo de más de 100 heridos. Esta matanza es el mejor logro de la mal llamada reforma educativa, y a querer o no, el titular de la SEP, Aurelio Nuño, se manchó las manos de sangre y Gabino Cué se ganó a pulso el deshonroso título de asesino.

Gabino Cué, con su arrodillamiento ante Aurelio Nuño y ante el presidente Peña, provocó un paro educativo de 100 días en Oaxaca y hoy este corrupto y traidor vive como rey y en la impunidad.

Nuño y a Gabino Cué no pudieron derrotar a esta Sección 22 y como lo dice el líder magisterial, Eloy López Hernández, jamás podrán vencer a la gloriosa Sección 22.

El delincuente y gran ladrón, Gabino Cué, fabricó delitos a los exlíderes sindicales, entre ellos el de lavado de dinero, algunos de ellos fueron confinados en mazmorras del penal de máxima seguridad del Altiplano y en prisiones de Hermosillo, Sonora. La gran paradoja es que la justicia oaxaqueña y mexicana está muda, sorda y ciega ante los latrocinios cometidos por el exgobernador y su banda de delincuentes conque desgobernó al estado. Nuño, ante estos latrocinios y la matanza de Nochixtlán, se hace como el tío Lolo y aun así hay quienes lo candidatean como el delfín de Peña Nieto para la Presidencia de la República.

¡En hora buena, licenciado Celestino! Hacía 40 años que un secretario de Salud del estado de Oaxaca no visitaba la Dirección de Administración de dicha secretaría, hará menos de 15 días que el actual titular, Celestino Alonso Álvarez, visitó esa Dirección. Esto queda para la historia y como un compromiso de servir a Oaxaca y a los oaxaqueños. ¡En hora buena, licenciado Celestino!

El doctor Jorge Concha, un oaxaqueño digno. Por cierto y ya que tocamos el tema de salud es de hacerse notar que el doctor Jorge Concha Suárez, egresado de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (Uabjo), fue nombrado jefe del Departamento de Prevención y Control de Enfermedades Transmitidas por Vector, como el zancudo, alacrán, chinches, etcétera.

Su nombramiento no sólo es un reconocimiento a su trabajo en la Secretaría de Salud, sino una gran oportunidad para comprometerse y servir a Oaxaca y a los oaxaqueños, quizá por ello es objeto de críticas para empañar su carrera profesional, pero quienes le conocen tiene en alta estima y respeto al médico Jorge Concha, quien como carta de presentación cursa la Maestría en Salud en la Uabjo y es médico titulado por esa Universidad.

En consecuencia, el doctor Concha Suárez es un profesional y un oaxaqueño digno, camina con la frente en alto ante la sociedad oaxaqueña. Es orgullo de Zimatlán de Álvarez y de su familia. Por cierto, aprovechamos la ocasión para enviar un saludo a los cascos amarillos del paludismo que combaten las enfermedades trasmitidas por vector en las 11 jurisdicciones sanitarias dependientes de la Secretaría de Salud. Una labor encomiable realizada por estos hombres olvidados.