A pesar del apoyo fiscal, el precio del combustible se disparó hasta 18%26.4 POR CIENTO MENOS SE RECAUDÓ POR IEPS AL COMBUSTIBLE EN 2017. |
El subsidio que aplicó el gobierno federal al precio de las gasolinas y el diésel en 2018 generó un hoyo en las finanzas públicas, conocido como gasto fiscal, de 70 mil 967 millones de pesos, 4.5 por ciento más que en 2017.
El monto erogado es superior a los 45 mil millones de pesos de presupuesto que tuvo la Universidad Nacional Autónoma de México el año pasado.
Sin embargo, la cifra fue menor a la esperada por el gobierno federal, pues según el Presupuesto de Gastos Fiscales 2018, el monto estimado superaba los 100 mil millones de pesos.
Si bien el beneficio fiscal no contuvo del todo los precios, sin él, los consumidores mexicanos hubieran pagado más de dos pesos adicionales por litro en los meses críticos, dijo Ramses Pech, analista del sector energético.
Para 2018, la Secretaría de Hacienda estimaba recaudar 258 mil 633.6 millones de pesos por concepto del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a gasolinas y diésel; pero, sólo captó 187 mil 666 millones, 17.4 por ciento menos que en 2017 en términos reales (considerando la inflación).
En 2017, este beneficio fiscal que otorga la Federación para suavizar el incremento abrupto en el precio de los combustibles ascendió 67 mil 933 millones de pesos, según cifras de Hacienda.
26.4 POR CIENTO MENOS SE RECAUDÓ POR IEPS AL COMBUSTIBLE EN 2017.
PROCESO
A partir de 1994, el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios a las gasolinas y el diésel se aplicó mediante una tasa variable que permitía ajustar el precio de los combustibles al administrado por el gobierno federal.
Esta política estuvo vigente hasta 2015, cuando derivado de la profunda caída en los precios del petróleo, se obtuvo una captación positiva de IEPS federal (el componente más importante) de 193 mil 764 millones de pesos, luego de nueve años de tener cifras negativas, según el Centro de Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados.
Para 2016, se realizó un ejercicio de liberación parcial de los precios, fijando una banda de flotación de más menos 3 por ciento respecto del precio promedio observado en el año anterior, mecanismo que originalmente estaría vigente para 2017.
Sin embargo, la banda de flotación restringió el libre movimiento de los precios y propició que éstos nuevamente tuvieran un incentivo fiscal. Para 2017 se decidió volver a cambiar las reglas y anticipar la liberación de los precios previsto originalmente para 2018, eliminando la banda de flotación que debería haberse establecido durante este año.
El Heraldo de México.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario