miércoles, 7 de noviembre de 2018

Templo Mayor (Columna).



SI ALGO quedó claro del encuentro entre Andrés Manuel López Obrador y las bancadas de legisladores de Morena, PT y el PES, es que han vuelto los tiempos del "lo que usted diga, señor Presidente".

COMO NO se veía desde la época del partidazo tricolor, la mayoría que controla la Cámara de Diputados y el Senado dejó en claro que no habrá separación, sino supeditación de poderes. Y quienes no lo crean, échenle ojo al trabajo legislativo: en lo que va de esta legislatura se han presentado 100 iniciativas de ley, más de 40 reformas constitucionales y lo que se ha aprobado hasta ahora es... ¡una ley!

EN SU AFÁN por darle sustento a esa cosa llamada "cuarta transformación" los grupos parlamentarios que dirigen Mario Delgado y Ricardo Monreal, más sus satélites del PT y el PES, han dejado ir más de la mitad del periodo ordinario dando palos de ciego, sin que hasta ahora se vean los resultados prometidos.

ADEMÁS, todo parece indicar que la agenda legislativa de fondo, la de los temas que importan como las reformas educativa y fiscal, ésa les será dictada desde Palacio Nacional... para que no se pongan creativos.


AUNQUE el agua es la misma, hay diferentes estilos de enfrentar una crisis. Ante el megarrecorte en la Ciudad de México, el gobierno de José Ramón Amieva se arremangó y armó una fuerte campaña de información, dispuso de pipas y colocó tinacos en sitios públicos. En cambio, la Conagua que dirige Roberto Ramírez de la Parraminimizó el asunto y hasta presumió que terminarían las obras 6 horas antes de lo previsto.

CUANDO las cosas comenzaron a salir mal, la CDMX estaba preparada y aguantó no sólo los tres, sino seis días y medio sin abasto... pero, también, sin crisis. En cambio, el exceso de confianza dejó muy mal parada a la Conagua que no sólo no cumplió, sino que deja una obra inconclusa y un millonario gasto que se fue... ¡por un tubo!


AHORA se verá si el fiscal guerrerense Zuriel de los Santos es una persona de instituciones, o si deja que los ánimos personales le ganen a los resultados profesionales.

RESULTA que la diputada local Mariana García Guillén reveló amenazas de un supuesto un grupo criminal y planea denunciarlas ante la Fiscalía General. Sin embargo, no tiene mucha confianza pues ha sido una dura crítica del funcionario.

DE HECHO, tras la comparecencia en la que cuestionó a De los Santos por su mansión en Acapulco, las amenazas en su contra crecieron, una casa vecina a la suya fue baleada y le dejaron un mensaje intimidatorio. ¿A poco es casualidad?

Reforma

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