Redaccion
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La Auditoría Superior de la Federación (ASF) indaga del uso y destino de 581 millones de pesos destinados para la construcción de un Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca (CCCO) así como la remodelación del Auditorio Guelaguetza, obras que nunca se llevaron a cabo pero cuyos recursos si aterrizaron en las arcas del entonces gobernador Gabino Cué Monteagudo. La revisión de los expedientes ha generado citas oficiales ante las autoridades a los primos José Zorrilla de San Martín Diego y Francisco Zorrilla Ruiz, ex Secretario de Turismo y Director del Fideicomiso Logístico de Oaxaca (FIDELO) respectivamente, a quienes les ha exigido la documentación comprobatoria del dinero enviado, al ser los operadores de las licitaciones y el otorgamiento de las obras.
El órgano auditor del Congreso de la Unión establece que en las primeras revisiones realizadas al FIDELO se reportan irregularidades en la asignación de la obra desde la Secretaría de Turismo que encabezó José Zorrilla de San Martín Diego, y quien pretendía edificar junto a uno de sus hoteles, el Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca, obre que fue detenida a nivel local por las irregularidades de sus procedimientos, imposición del proyecto y la falta de una consulta ciudadana que avalara la misma.
A principios del 2015 el gobierno de Gabino Cué dispuso el inicio de la obra considerada “parteaguas” de su administración que ofrecía entre otros beneficios elevar los índices de ocupación hotelera con la llegada de grupos de convenciones, incentivo al turismo directo y una derrama económica que se situaría por encima de la media estatal.
La obra se rechazó porque había un claro vacío informativo en la sociedad que generó violentas protestas e incluso se les sumó el pintor Francisco Toledo que rechazó totalmente el proyecto, junto con un grupo de organizaciones ecologistas que vieron un golpe a la flora y fauna del Cerro del Fortín; la obra se canceló y se determinó meses después iniciarla en otro sitio, eligiendo el municipio conurbado de Santa Lucía del Camino, pero no se explicó en donde quedaron los 281 millones de pesos iniciales de inversión.
Paralelamente, la Secretaría de Turismo y FIDELO autorizaron la construcción de un estacionamiento de cuatro niveles en el que invirtieron alrededor de 350 millones de pesos y que se convirtió en un “elefante blanco” debido a que tras la cancelación del Centro de Convenciones los espacios de los cajones para más de 300 autos han permanecido vacíos desde su conclusión, el recurso de esta obra aún es auditado y se espera el resultado de la misma.
EXPEDIENTE LOCAL
Por otra parte, el ex titular de la Secretaría de Turismo ha sido citado a declarar en torno al uso y destino de 200 millones de pesos otorgados por la Federación para llevar a cabo obras en el Auditorio Guelaguetza, consideradas como importantes pero que no se llevaron a cabo.
La Secretaría de la Contraloría y Transparencia Gubernamental, informó que el ex funcionario de Gabino Cué Monteagudo enfrenta un procedimiento administrativo que puede derivar en acciones penales, si las autoridades correspondientes determinan que incurrió en delitos como desvío de recursos.
“Estamos indagando el uso que le dieron a esos 200 millones de pesos, oficialmente se sabe que estaban destinados para otras de mejoramiento del Auditorio como las escalinatas, los baños, colocación de luminarias y otras obras que no se llevaron a cabo”, explico el titular de la dependencia, José Angel Díaz Navarro.
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