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Pedro Juan García Montes, presidente municipal de San Pedro y San Pablo Teposcolula, denominado en septiembre de 2015 como Pueblo Mágico, denunció un fraude y la “pérdida” de 2 millones de pesos en la construcción de un auditorio de usos múltiples con cancha deportiva, cuyo costo fue de seis millones de pesos, el cual está convertido en “elefante blanco”.
De acuerdo con el munícipe, los actores involucrados en el presunto fraude son la diputada federal, Yolanda López Velasco, quien gestionó la obra, su sobrina Ivette Herrera, y los constructores Omar Olea Méndez y Alfredo Manuel González Mendoza de GOMA Construcciones.
Los seis millones de pesos, detalló García Montes, se etiquetaron así: dos para la pavimentación de 300 metros de la calle Tecnológico, que conduce a la obra deportiva, y cuatro para la construcción del auditorio, convertido hoy en grotesco “bodegón”, sin razón de ser.
Constructoras se quedan con el presupuesto
De acuerdo con las denuncias de autoridades y pobladores, el expresidente municipal priista, Felipe de Jesús Morales Lara, le entregó dos millones cien mil pesos al constructor Omar Olea Méndez, originario de Huajuapan de León, con quien firmó el contrato para ejercer los seis millones de pesos que costaría la obra.
Sin embargo, Olea Méndez se fue con esos recursos y jamás regresó a realizar la obra, la cual se quedó, hasta cierto punto, sólo en planes, por lo que el edil anterior levantó una demanda en contra del constructor, por no cumplir con el contrato que se le había encomendado.
Después de esta primera denuncia, Morales Lara contrató a Alfredo Manuel González Mendoza, también de Huajuápan de León, cuya empresa es GOMA Construcciones, a quien le asignaron la obra del auditorio de usos múltiples con cancha deportiva y le entregaron tres millones novecientos mil pesos.
Cuando el actual edil Pedro Juan García asumió su mandato, el 1 de enero de 2017, se encontró con la empresa GOMA Construcciones, que debió terminar el proyecto desde el 15 de diciembre de 2016, sin embargo, al revisar la obra, se encontró con muchas anomalías y vicios ocultos, como por ejemplo: el piso de concreto de todo el edificio que en el catálogo de conceptos marcaba de 15 centímetros, el constructor lo hizo de 10.
Además, fue colocada una lámina calibre 32 en la techumbre, cuando el catálogo de conceptos manejaba calibre 26, y aunque como autoridad municipal se opuso, había un comité para la obra, que estaba formado por personas de la misma población pero lo encabezaba la señora Ivette Herrera, sobrina política de la diputada Yolanda López.
Ivette Herrera se responsabilizó de la colocación de la lámina, aun sin el aval del presidente municipal Pedro Juan, quien no firmó ningún documento que avalara la acción.
“Colocaron la lámina, sin embargo, como ya se acercaba la fiesta patronal, el señor no terminó la obra, hubo descontento con algunos comerciantes de la población, puesto que el constructor les debía dinero de materiales”, sostuvo García Montes.
“Creo suponer que sí tienen alguna relación,(GOMA construcciones y la diputada Yolanda López) porque es la empresa que trajo la señora Ivette Herrera, ella era la que encabezaba la comisión del salón de usos múltiples”, agregó.
Y relató que cuando los pobladores se acercaron a exigirle el pago, el constructor Alfredo Manuel González Mendoza se molestó y también se fue de Teposcolula, dejando la obra inconclusa.
Exigen devolución de los recursos
Ante la falta de cumplimiento de GOMA Construcciones y su director Alfredo Manuel González Mendoza, vinculado a la diputada federal Yolanda López Velasco, el 2 de agosto pasado las autoridades municipales interpusieron una nueva demanda ante una autoridad federal por ser recursos públicos de la federación.
Al respecto, el edil en funciones denunció que el proyecto es un fraude que no se puede ocultar, por lo que la obra resultó en un “elefante blanco” que no tiene fachada, no está pintada, carece de sanitarios y luz eléctrica, el piso ya se deterioró y en general todo está en muy mal estado.
Por si fuera poco, algunos concretos ya presentan cuarteaduras y en el espacio donde van los sanitarios, el techo presenta severas fallas, “es una obra que en la realidad no pudo haber tenido el costo que se pagó”, sostiene.
Ahora los pobladores de San Pedro y San Pablo Teposcolula y su autoridad esperan que las partes demandadas sean notificadas para que devuelvan los recursos públicos federales, puesto que la exigencia principal es la recuperación del dinero que no se ejerció.
A la par de esta denuncia, también entregaron al director general de Auditoría a los Recursos Federales de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), José Jesús Tristán Torres, el dictamen de la obra denominada “Construcción de Auditorio de Usos Múltiples con Cancha Deportiva”, con número de obra M/339/001/201 y contrato con número FFIEM/339/001/2016, donde hubo irregularidades por parte de la empresa ejecutora.
Los afectados denuncian que el proyecto no se siguió como lo establecía el catálogo de conceptos, además las constructoras involucradas se llevaron parte del recurso e hicieron mal manejo del mismo y dejaron la obra inconclusa.
“El bodegón de Yolanda”
El dictamen a la obra, bautizada por los pobladores de Teposcolula como “El Bodegón de Yolanda”, arrojó que el total de importe ejecutado fue de dos millones 998 mil 218 pesos y el importe contratado fue por tres millones 920 mil pesos.
Hay un faltante de novecientos veintiún mil, setecientos ochenta y dos pesos; cabe mencionar que los trabajos realizados en 2016 son muy difíciles de cuantificar, puesto que la mayoría de ellos se encuentra en la cimentación, o bien, son trabajos que se ejecutaron mientras las nuevas autoridades municipales aún no tomaban posesión del cargo.
Luego de ocho meses de haber tomado protesta como munícipe de San Pedro y San Pablo Teposcolula, García Montes informó que no han visto a la diputada Yolanda López, “sólo ha mandado a un operador que es su sobrino el señor Fidel, a su vez esposo de Ivette Herrera y vino de alguna manera a tratar de conciliar conmigo”, reveló.
“Pero lo que quería era que yo recibiera la obra en las condiciones en que se encontraba y obviamente me opuse. Ese es el único contacto que tuve con ellos, de ahí ya no he tenido ningún contacto, ella nunca me ha hablado, nunca me dijo vamos a resolver este asunto, sino sólo lo hizo a través de una tercera persona”, agregó.
La estricta exigencia de las autoridades municipales es la devolución de los recursos públicos, primero los dos millones 100 mil pesos que se llevó el constructor Omar Olea Méndez para que se puedan pavimentar los 300 metros de la calle Tecnológico como está contratado, porque es un dinero del pueblo y los hechos no se pueden quedar impunes.
De igual forma, pidió, que se termine el auditorio, tal como estaba estipulado.
Con información de Primera Línea
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