El presidente electo plantea desaparecer todas las delegaciones estatales y sustituirlas por 32 coordinaciones, como apuesta de austeridad FOTO: MARIO JASSO /CUARTOSCURO.COM |
Francisco Nieto
El virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, analiza la posibilidad de reestructurar toda la burocracia mexicana y una de sus apuestas de su próximo gobierno es la de desaparecer a todas las delegaciones federales y sustituirlas solamente por 32 coordinaciones estatales.
La apuesta es que este nuevo modelo de trabajo rompa con los mecanismos históricos de representantes federales en todo el país, los cuales están distribuidos por dependencia, paraestatales y órganos
desconcentrados.
Estos 32 coordinadores estatales serían la cabeza organizativa y el enlace directo con la Federación, pero tendría un equipo de colaboradores con lo que se atendería la diversidad de temas que van desde salud, desarrollo social hasta procuración de justicia.
El propio López Obrador reconoció que analiza este posible ajuste administrativo a nivel federal, mismo que será parte del gobierno austero que quiere encabezar en los próximos seis años.
“Estamos organizándonos para ser más efectivos en la aplicación de los programas que se van a llevar a cabo; estamos organizándonos bien, la gente quiere que haya un cambio verdadero.
“Se votó por una transformación; entonces, se van a hacer todos los cambios que se requieran para cumplir los compromisos que hicimos durante la campaña y por eso necesitamos ajustar la estructura organizativa, y estamos organizándonos con ese propósito”, reconoció.
Los servidores públicos en el orden federal son un millón 698 mil 161 empleados, los cuales están distribuidos en todo el país. La Administración Pública federal cuenta con 97 instituciones centralizadas, 18 secretarías de Estado y 74 órganos desconcentrados.
El número de delegados o empleados varían, según las dependencias. Por ejemplo, la Secretaría de Educación Pública (SEP) tiene 31 delegados; Economía 49; Relaciones Exteriores, 49, entre otras.
Ayer, López Obrador tuvo una reunión de casi dos horas con representantes de Morena en los estados. De acuerdo con la próxima senadora por el Estado de México, Delfina Gómez, el tabasqueño les confirmó que habrá un gobierno austero y pidió a los representantes del nuevo gobierno ser corresponsables con esa misma propuesta.
“A todos nos va tocar hacer esa austeridad, la cual es justa y necesaria”, dijo la ex candidata a la gubernatura del Estado de México.
Explicó que el tabasqueño les pidió no faltar a las promesas de campaña, es decir, no defraudar a la ciudadanía que mayoritariamente les dio su respaldo en la pasada elección del 1 de julio.
Heraldo de México
No hay comentarios.:
Publicar un comentario