La meta de un mayor equilibrio en las finanzas públicas está a punto de lograrse este año, aunque para ello se tuvo que reducir fuertemente el gasto público y la inversión en obra.
Durante octubre, el superávit primario de las finanzas públicas se ubicó en 64 mil 680 millones de pesos. Esta medida muestra la diferencia entre los ingresos y gastos del sector público, excluyendo el pago de intereses y comisiones de la deuda.
Para el acumulado de enero a octubre, el superávit primario llegó a 480 mil 826 millones de pesos, cifra tres veces superior a la alcanzada en el mismo periodo de 2016, según cifras de la Secretaría de Hacienda contenidas en el informe mensual de finanzas públicas.
Lo anterior fue posible debido a una reducción de 6 por cierto real del gasto neto del sector público y el ligero incremento de los ingresos presupuestarios, los cuales avanzaron 1.2 por ciento en términos reales durante el periodo enero-octubre.
Por grandes líneas del gasto, destaca cómo se ha castigado la inversión en obra pública en lo que va del año.
Hacienda informó que el gasto programable registró una disminución de 10.6 por ciento real, dentro del cual la inversión física se desplomó 24.6 por ciento en los primeros 10 meses del año, respecto a igual periodo de 2016.
El gasto en servicios personales, una de las líneas con mayor peso dentro del gasto programable, cayó 2.5 por ciento.
Sin embargo, el gasto no programable continúa con un crecimiento muy superior al de los ingresos, con un avance de 8.6 por ciento real, dentro del que destaca el avance del costo financiero de la deuda con 9.6 por ciento, para ubicarse en 372 mil 341 millones de pesos.
REFORMA
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