La Razón
Cualquier persona puede conseguir en la Plaza de Santo Domingo de la Ciudad de México etiquetas falsas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para sellar botellas de bebidas alcohólicas apócrifas y hacerlas pasar como legales.
En esta plaza, ubicada en el corazón del Centro Histórico, y famosa porque ahí se elaboran diversos documentos falsos, basta contactar a un coyote y esperar dos horas para conseguir los llamados marbetes o etiquetas que emite la SHCP para sellar botellas, por 8 pesos, si se trata de una bebida nacional, o 15, si es para uno de procedencia extranjera, según constató La Razón en el lugar.
Juan, uno de los coyotes que se ubican en la entrada de República de Brasil, dice que estos registros no se venden por pieza, sino por ciento, y para evitar problemas los tienen en una bodega en Tepito.
“Se las hacemos igualitas a la original, incluso hasta con el holograma. Sólo deme chance unas dos horas para traérselas”, dice al tiempo que se interna a un establecimiento sin razón social que en cuya fachada anuncia la elaboración de diversos impresos.
“No te puedo meter al taller, pero vamos juntos, me esperas en la calle y pregunto en cuánto te sale cada pieza de lo que quieres”, explica.
En menos de 20 minutos, el coyote entregó la muestra de un marbete que, aunque estropeado, parece auténtico y cuenta con un holograma con siglas de la SHCP.
Álvaro Pérez, comisionado de Operación Sanitaria de la Comisión Federal de Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), dijo que el marbete además de acreditar la procedencia legal de una bebida alcohólica, asegura que el producto fue realizado bajo controles sanitarios.
“¿Qué está ocurriendo con los marbetes falsificados? Que simplemente el código QR que tienen no puede ser leído por un dispositivo electrónico, llámese tableta o celular. Ese marbete te dice qué clase de bebida alcohólica es, qué marca, de cuántos mililitros es y si no se pueden leer estos datos, tenemos que dudar de la bebida”, explicó.
Por tratarse de falsificación de un documento oficial, dijo, es un delito que debe perseguirse por la PGR.
Añadió que la Cofepris interviene también en el caso de estos registros, ya que “constatamos que el marbete pueda ser leído y ser desplegada la información correspondiente. De no ser así, se asegura el producto de manera preventiva, y el productor, comercializador o el distribuidor tendrán que acreditar, con documentación original, que es legal el producto”.
Comentó que “cuando no corresponde un marbete a la información que debe contener por el tipo de bebida alcohólica o cuando no es el que otorga la autoridad fiscal, se presume que es una bebida que fue elaborada sin condiciones de higiene o que es un producto que fue internado al país de contrabando. Entonces, puede haber diversas causas relacionadas con un marbete falso”
Según la Cofepris, en los últimos cinco años se han asegurado más de 5 millones de litros de bebidas alcohólicas ilegales, principalmente en Jalisco, Ciudad de México, Veracruz y Estado de México.
Cifras de la Comisión para la Industria de Vinos y Licores (Civyl) señalan que en el país el consumo anual de bebidas alcohólicas es de 47 millones de cajas, de las cuales 30 millones son del mercado formal y 17 millones del mercado informal. Agrega que por la venta ilegal la SHCP pierde 6 mil 500 millones de pesos al año.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario