El norte del Istmo, lugar de muerte

REDACCION

ARCHIVO

Un miembro de la PABIC fue sorprendido por ladrones y ultimado.

ISTMO DE TEHUANTEPEC, Oaxaca.- La zona norte del Istmo, también denominado zona húmeda, ha vivido una escalada de violencia. Una espiral de sangre se comienza a elevar y los ciudadanos que no están acostumbrados y mucho menos preparados para poder hacer frente, no de forma física ya que esa es labor de los cuerpos de seguridad, han comenzado a temer por sus vidas y la de sus seres queridos.

Muertes violentas y ataques en zonas transitadas o céntricas no son más que el reflejo de una descomposición del tejido social, lo que ha desatado la ola de agresiones y muerte. La importancia que tienen diversos lugares para la delincuencia los han hecho salir a imponer su mando en las calles, parecen no temer a la ley a la cual parecen retar.

Los hechos se registraron tan sólo en el mes de junio, del 7 al 30, en las diversas partes de la zonas, aquí una breve descripción:

Matías Romero

Un hombre al cual identificaron por su apodo: “el Güero” fue ultimado en su casa, ubicada en la Calle Hombres Ilustres; cerca del centro de la población.

Dos hombres, uno se encargó del sangriento trabajo y el segundo lo esperó en el vehículo de huida, se presentaron aproximadamente a las 20:30 horas. El solitario pistolero le pegó tres disparos y se fue.

El Güero no reaccionó debido a lo inesperado del ataque, arrojó grandes cantidades de sangre en la silla donde terminó su cuerpo, los agentes peinaron la zona pero no encontraron a nadie.

Una de las cosas que más alarman a las personas son los rumores, lo que se cuenta sobre algo que aparentemente no existe como si fueran fantasmas y bestias que habitan en lo profundo del inconsciente y buscan cualquier forma de salir.

El Güero murió al recibir tres disparos.

Para esto se encuentra el ejemplo de presuntos “levantones”, los testigos que no precisan en los detalles por temor a represalias han comentado que en la ciudad se han dado dos casos.

Santa María Petapa

Sus habitantes tuvieron la horrenda experiencia de ver a un hombre identificado cono José, de 23 años, ser apuñalado por desconocidos en el centro de la ciudad.

Los dos atacantes laceraron con un arma blanca en diversas partes del cuerpo a su víctima y lo dejaron a que agonizara en la vía pública. Los servicios de emergencia lograron llegar antes para brindar la ayuda necesaria.

Tolosita Donaji

Los campestres caminos se vieron manchados por la sangre, no sabe quién o quiénes rompieron uno de los tabús y mandamientos más grandes para un humano: matar. Un domingo, el sector de Palomares de la Policía Estatal recibió el informe de que en el paraje de la agencia ya mencionada había un cadáver.

Un arma del calibre 9 milímetros le arrebató la vida a un hombre que respondió al nombre de Héctor “V” “D”, que después se supo era militar asignado a Ixtepec, en un camino de terracería de Palo Grande.

Agregar leyenda

Palomares

Se dio el caso de un presunto ajuste de cuentas entre guachicoleros, en una cantina y mientras tomaba muy feliz Mario “V” “G”, un presunto líder de una banda de los ahora famosos “chupaductos” que se dedican a la venta de gasolina robada, fue increpado por un sujeto al que solamente identificaron como el Mono.

Empezó una discusión por un tortón que les decomisaron, el intercambio de groserías acabó con el intercambio de plomo entre los protagonistas. Según testigos, el Mono fue más rápido y le puso fin a la vida de Mario con 11 balazos, después se retiró del lugar pues estaba herido.

Y el 30 de junio, Palomares fue el centro de una balacera que culminó con el saldo de un muerto y un herido.

El fallecido era un integrante de la Policía Auxiliar Bancaria y Comercial (PABIC), el uniformado no se acorbadó y le hizo frente a unos individuos que pretendían asaltar una bodega de DICONSA que está en palomares.

Tres individuos se vieron sorprendidos por el uniformado y le dispararon a quema ropa, el elemento alcanzó a responder e hirió a uno de sus atacantes. Los disparos desataron la alarma y los maleantes emprendieron la huida, en el lugar dejaron a su secuas herido y el cuerpo del PABIC que respondió al nombre de Juventino “T” “M” y era de San Juan Guichicovi.

Temor sobre ruedas

Se ha señalado que a finales del mes de junio se dejó ver convoy de gente armada y encapuchada por: Matías Romero, El Barrio de la Soledad, Santa María Petapa y Santo Domingo Petapa.

Dicha información pone nerviosa a la ciudadanía, e incluso a los habitantes de la colonia Oaxaqueña y el Llano Suchiapa, testigos que piden se omita su nombre, señalan que esas personas se dedican al negocio de hidrocarburos en el mercado negro y, al parecer, pelean la titularidad de la plaza.

De manera extraoficial, se reportó que en el Barrio de la Soledad se dejó ver un convoy y se escucharon descargas de armas de grueso calibre. Los barreños que pidieron reservar sus nombres, indicaron que la semana pasada se escuchó una balacera.

Ante lo descrito, viven con el temor de que estos actos violentos se vuelvan parte de la rutina. Precisaron que los disparos se escucharon por la Colonia Chapala y un lugar, popularmente conocido, como La Ceiba. Estos lugares se ubican cerca de la carretera que conduce a la cabecera municipal de Santa María Petapa.

Los preocupados testigos refieren que ahí existe el presunto comercio de combustible ilegal. Además, recuerdan que hace un año se dio un enfrentamiento entre grupos contrarios cerca del Salón Comunal, con saldo de tres muertos.