A Rubén Vasconcelos Méndez le tocó bailar con la más fea por los próximos siete años. Afortunadamente, tiene muy claro su proyecto de trabajo como Fiscal General de Oaxaca
Alfredo Martínez de Aguilar
Oaxaca, Oax.- Para terminar con la devastadora corrupción y la impunidad, está dispuesto a echarse el trompo a la uña de no ceder ni menos negociar la aplicación de la ley con los grupos de presión y chantaje.
Sabe que la sociedad exige de forma prioritaria al ministerio público actuar imparcialmente y trabajar técnicamente, sin que haya sujetos privilegiados y chantajes al Gobierno del Estado.
Entrevistado en el programa "Detrás de la Noticia" por Canal Gente Libre, se compromete a despolitizar la actuación y trabajo del ministerio público en todos los casos.
El doctor en derecho, egresado de la Universidad Complutense de Madrid, dice que el primer día que llegó a la Fiscalía del Estado, jaló a sus órganos directivos y les dio la indicación:
"Ninguna averiguación previa debe quedar parada sin trámite específico, todas tienen que tener trabajo, hechos relacionados con la investigación. La instrucción específica es trabajar todas las carpetas previas y llevar a la justicia a quien sea responsable. No habrá más impunidad".
Dado su don de gente, siempre educado, amable, atento y accesible, Vasconcelos da a primera vista la impresión equivocada que es un servidor público al que faltara carácter, pero no es así.
A partir de la premisa que él no tiene ninguna intención política ni menos el Ministerio Público, afirma que cuando ambos entreguen resultados contribuirán a evitar la manipulación de los asuntos.
El ministerio público oaxaqueño, es muy escrúpuloso. Su compromiso específico es inicialmente con la víctima concreta y los resultados de la investigación serán dados a conocer a ésta.
Falta avanzar en construir el debido proceso y justicia para la víctimas, que contribuirá a la armonía, a la seguridad, a la disminución de la delincuencia, y evitará la manipulación de los asuntos.
Después del contacto con las víctimas de delitos confirmó su convicción que el Estado tiene la obligación de prestar asistencia a las víctimas, así como el estado tiene al obligación de protegerlas.
Los delitos violan derechos y causan perjuicios a las víctimas directas e indirectas porque afecta su vida e impactan a la sociedad, y el estado tiene la obligación que rehagan su proyecto de vida.
Los delitos de secuestro y homicidio afectan a toda la familia y todos tienen derecho a ser restituidos en sus derechos. Es la labor de la Fiscalía para que funcione bien el sistema de justicia.
El doctor Vasconcelos Méndez reiteró de manera insistente que la Fiscalía General del Estado tiene que avanzar en construir no solo un debido proceso, sino ante todo en justicia para las víctimas.
Sin minimizar el problema recordó que históricamente Oaxaca siempre ha estado ubicado en los más altos índices de homicidios, por razones político-sociales. Esto es importante decirlo, subraya.
Informó que al 31 de mayo se registraban 445 homicidios en el Estado y de éstos 100 ocurrieron en la región de los Valles Centrales, y las carpetas abiertas en la Zona Metropolitana, muy grave.
Sin embargo, no habíamos visto ejecuciones de grupos de delincuencia organizada que se están peleando la plaza, no hemos llegado al nivel de otros estados vecinos, pero ya existe el problema.
En la entrevista, se pronunció por hacer una labor de reforzamiento y cuidar que este tipo de homicidios no vaya en aumento en las regiones de la Costa, el Istmo y la Cuenca del Papaloapan.
E s un reto enorme. Siente el respaldo de la sociedad y la procuración de justicia tiene que ver con éste. Tiene claro que es una exigencia que el sistema de procuración de justicia funcione mejor.
Está muy comprometido y más ahora que la sociedad considera que puede contribuir de alguna manera con el fortalecimiento del sistema de justicia y dar resultados específicos e inmediatos.
Lo peor que podemos hacer en las instituciones gubernamentales es quedarnos cruzados de brazos al pensar que porque las cosas han sido así deben de continuar, dijo por el Canal Gente Libre.
Dada su amplia experiencia, admitió que como sociedad hemos normalizado muchas circunstancias, pero tenemos que pensar diferente. Ello nos llevará varios años, pero es momento de comenzar.
Tengan la seguridad que Oaxaca tiene por fiscal a un hombre que no se cruzará de brazos y que no está conforme con lo que está sucediendo, que considera que las prioridades de la sociedad son sus prioridades y que sabe que una de esas prioridades es mejorar el sistema de procuración de justicia.
Señala que hay que fijar prioridades, una estrategia adecuada en lo que más nos afecta como sociedad, hacer un análisis de riesgos, saber qué delitos se están cometiendo en toda la entidad. Es obligado ubicar a bandas y grupos delincuenciales diversos y en virtud de este diagnóstico adecuado los agentes del ministerio público deben dar respuesta en los lugares con más problemática.
Descentralizar y desconcentrar. La descentralización es un tema focal. Hay que reforzar el proceso de descentralización y focalizar los esfuerzos. La fiscalía no resolverá todos los delitos, ningún sistema puede hacerlo en ninguna parte del mundo, pero sí establecer prioridades. Fijar objetivos concretos.
Sostuvo que en la Fiscalía hay mucha conciencia social, sobre todo en el tema del secuestro, a grado tal que se construye un edificio que albergará la unidad especializada contra el delito de secuestro.
Anunció que harán esfuerzos para un buen equipamiento y que quienes ahí laboren estén debidamente capacitados. Hay reconocimiento nacional a la labor de esta unidad en años anteriores.
Es importante que los órganos de seguridad tengan conciencia que éste es un tema de enorme prioridad en la persecución de los delitos y para prevenir su comisión. Deben asumir su responsabilidad y alimentarnos ambos de información.
La Fiscalía puede proporcionar a la Secretaría de Seguridad Pública información del comportamientos de los delincuentes, pero ellos también tienen que analizar los contextos en los que se dan estos delitos, para compartir esa información y entre ambas dar prioridad a la prevención de los delitos y lograr resultados efectivos.
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